¿Ciática o Síndrome Piramidal? Aprende a diferenciarlos y cómo tratarlos desde la fisioterapia
El dolor lumbar que irradia hacia la pierna es una de las causas de consulta más habituales en fisioterapia. Muchas personas llegan a nuestra clínica convencidas de que sufren ciática, cuando en realidad presentan un síndrome piramidal, una afección muy similar en síntomas, pero con un origen completamente distinto.
Aunque ambas pueden provocar molestias en el glúteo y la pierna, conocer sus diferencias es clave para aplicar el tratamiento adecuado y recuperar la calidad de vida lo antes posible.
En este artículo te explicamos de manera clara cómo identificar cada caso, en qué se diferencian y qué abordaje realizamos desde la fisioterapia en el Centro Médico Pérez Frías, tu clínica de referencia en Málaga para el tratamiento del dolor lumbar y las lesiones musculoesqueléticas.
¿Qué es exactamente la ciática?
La conocida “ciática” no es una lesión concreta, sino un conjunto de síntomas provocados por la irritación o compresión del nervio ciático, el más largo y grueso del cuerpo humano. Este nervio nace en la región lumbar (entre las vértebras L4 y S3), atraviesa el glúteo, recorre la parte posterior de la pierna y llega hasta el pie.
Cuando sufre presión en alguno de sus segmentos, aparecen síntomas muy característicos:
- Dolor lumbar irradiado hacia la parte posterior de la pierna
- Hormigueo o sensación de “pinchazos”
- Descargas eléctricas
- Entumecimiento
- Debilidad muscular
La causa más frecuente es una hernia o protrusión discal que comprime una raíz nerviosa, aunque también puede originarse por estenosis de canal, espondilolistesis, artrosis avanzada o procesos inflamatorios. Por tanto, su origen está en la columna vertebral, y el tratamiento debe orientarse tanto al control del dolor como a la descompresión de las estructuras afectadas.
¿Qué es el síndrome piramidal?
El síndrome piramidal, también llamado síndrome del piriforme o incluso “falsa ciática”, aparece cuando el músculo piramidal —ubicado en profundidad bajo el glúteo— aumenta su tensión o se inflama. Esta contractura puede rozar o comprimir el nervio ciático debido a su proximidad anatómica, generando un dolor que se confunde fácilmente con la ciática clásica.
Sus síntomas más habituales son:
- Dolor profundo y localizado en el glúteo
- Irradiación hacia la parte posterior del muslo
- Molestias al permanecer sentado mucho tiempo
- Dolor al cruzar las piernas
- Sensación de tensión en la pelvis o la cadera
Aparece con frecuencia en personas que pasan muchas horas sentadas, corredores, atletas o personas que realizan movimientos repetitivos sin compensar la musculatura.
La principal diferencia: el origen no está en la columna, sino en un músculo contracturado.
¿Cómo se producen?
Origen de la ciática
Su mecanismo suele seguir esta secuencia:
- El disco intervertebral se protruye o se hernia.
- La hernia comprime una raíz nerviosa.
- Se genera un proceso inflamatorio.
- Aparece dolor irradiado acompañado de síntomas neurológicos.
Otros factores como traumatismos, artrosis o un canal lumbar estrecho también pueden desencadenarla.
Origen del síndrome piramidal
En este caso, el mecanismo es distinto:
- El músculo piramidal se sobrecarga por sedentarismo, mala postura, movimientos repetitivos o deporte intenso.
- El músculo aumenta su tensión y volumen.
- Ese aumento de tono comprime el nervio ciático en la zona glútea.
- Aparece dolor irradiado, pero sin lesión lumbar.
En resumen: la ciática es un problema estructural lumbar; el síndrome piramidal es un problema muscular.
¿Cómo diferenciar la ciática del síndrome piramidal?
Aunque los síntomas pueden confundirse, hay señales claras que nos permiten distinguir cada cuadro:
1. Localización del dolor
- Ciática: comienza en la zona lumbar y baja por la parte posterior de la pierna.
- Síndrome piramidal: se concentra en el glúteo y puede irradiarse al muslo.
2. Actividades que lo empeoran
- Ciática: empeora al toser, estornudar o mantenerse de pie mucho tiempo.
- Síndrome piramidal: empeora al estar sentado, correr o subir escaleras.
3. Movimientos desencadenantes
- Ciática: movimientos que comprimen la columna, como flexionar el tronco.
- Síndrome piramidal: cruzar las piernas o rotar la cadera hacia fuera aumenta el dolor.
4. Exploración física
En consulta realizamos pruebas específicas:
- Ciática: test de elevación de pierna recta (Lasègue) positivo.
- Síndrome piramidal: test FAIR, Freiberg o palpación profunda del glúteo dolorosa.
5. Síntomas neurológicos
- Ciática: puede haber pérdida de fuerza o alteración de la sensibilidad.
- Síndrome piramidal: rara vez produce déficit neurológico.

Tratamiento fisioterapéutico de la ciática
El objetivo es disminuir la inflamación de la raíz nerviosa, reducir la compresión y mejorar la movilidad lumbar.
Las técnicas más habituales incluyen:
1. Movilización neural
Ejercicios suaves que favorecen el deslizamiento del nervio para reducir la irritación sin generar dolor.
2. Terapia manual
Movilizaciones articulares, técnicas de descompresión, masaje terapéutico y liberación de musculatura lumbar, glúteos e isquiotibiales.
3. Ejercicios de estabilización lumbar
Fortalecimiento de core, abdominales profundos y musculatura estabilizadora para mejorar el soporte de la columna.
4. Educación postural
Enseñar al paciente a moverse correctamente es fundamental para evitar recaídas.
5. Calor y electroterapia
Útiles en fases iniciales como complemento.
Tratamiento del síndrome piramidal
Aquí el trabajo se centra en relajar el músculo piramidal y equilibrar la musculatura glútea.
1. Liberación del músculo piramidal
Técnicas manuales profundas, masaje miofascial o presión en puntos gatillo.
2. Estiramientos específicos
Reducen la tensión y la presión sobre el nervio ciático.
3. Fortalecimiento del glúteo
Activar glúteo medio y mayor es clave para que el piramidal deje de trabajar en exceso.
4. Movilización de cadera y pelvis
Ayuda a restaurar patrones de movimiento eficientes.
5. Automasaje y calor local
Perfectos para mantener el progreso entre sesiones.
¿Cuándo ir al fisioterapeuta?
Siempre que haya dolor irradiado hacia la pierna, sensación de corriente, adormecimiento, molestias glúteas persistentes o dificultad para caminar o permanecer sentado. Cuanto antes se inicie el tratamiento, más rápida será la recuperación y menor el riesgo de cronificación.
En el Centro Médico Pérez Frías (Málaga) realizamos una valoración exhaustiva para diferenciar de forma precisa si se trata de ciática o síndrome piramidal, y diseñamos un tratamiento personalizado que te ayude a recuperar tu bienestar de manera segura y eficaz.
Si estás experimentando dolor o tienes dudas sobre tu diagnóstico, estaremos encantados de ayudarte.




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